
Infarto de miocardio. La importancia de las emociones en su prevención
Día Mundial del Corazón
El día 29 de septiembre se celebra el Día Mundial del Corazón y la Fundación del Corazón organiza una semana orientada a la prevención cardiovascular, su lema «Por un corazón feliz». A Área Humana nos encanta el lema, y podéis imaginar por qué… ¡eso es habéis acertado!: «Emociones y Salud» o «Emociones e infarto»
Emociones e infarto en la prevención: Emociones y Salud Cardiovascular
Una vez más la Psicología está presente en esta celebración, no hay ninguna duda de que las emociones influyen, y de que modo, en nuestra salud cardiovascular, por tanto… ¡Sonríe Corazón!
Actualmente la enfermedad cardiovascular y en especial el infarto de miocardio, es la primera causa de muerte en todo el mundo pero la buena noticia:
La mayoría de las enfermedades cardiovasculares (especialmente el infarto) pueden prevenirse modificando los factores de riesgo.
Todos conocemos los factores de riesgo como el tabaquismo, la dieta poco saludable y la falta de ejercicio, pero quizá muchas personas aún no sepáis que el estrés o la depresión y otras emociones pueden tener un papel muy importante tanto en estás enfermedades y en que se produzca un infarto, como en su recuperación. En definitiva hay estrecha relación entre emociones e infarto.
Julia Vidal psicóloga en Madrid y Directora del Centro Área Humana, forma parte del Comité de Expertos de la SEC (Sociedad Española del Corazón) y como tal ha asistido al evento de inauguración de la Semana del Corazón, para poner la atención sobre el cuidado de nuestras emociones y aportar un poco más de prevención en este grave problema médico que actualmente se cobra cada año 17 millones de vidas.
Y para empezar es importante conocer de que manera influyen las emociones. Algunos datos extraídos de investigaciones científicas nos dan una valiosa información.
Cuando sufrimos estrés durante largos periodos de tiempo, nuestras emociones negativas aumentan y con ellas el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, incluso un infarto:
- La ansiedad incrementa el riesgo de infarto en personas con enfermedades cardiovasculares.
- La depresión duplica el riesgo de padecer un infarto.
- 1 de cada 2 personas con enfermedad cardiovascular sufrirá depresión. Si esta no se trata, la recuperación es mucho más difícil y hay más riesgo de otro infarto.
La ira o el enfado excesivo están muy relacionados con la hipertensión, angina de pecho y el infarto de miocardio.
En definitiva, para prevenir las enfermedades cardiovasculares atiende a tu cuerpo, pero no olvides atender a tus emociones.
Cuídate… pon buenas emociones en tu Corazón