Educación Emocional y Social: La Inteligencia Emocional para niños
Inteligencia Emocional para niños
La Inteligencia emocional para niños y niñas logra que adquieran habilidades sociales, mejora su rendimiento escolar y facilita su bienestar psicológico.
Antes en clase, tenía problemas para controlarme, ahora, pienso en los pasos. Aunque esté muy enfadado, lo primero que hago es pararme pensar en mi “mejor yo” y así buscar una estrategia para pasar página a lo que me enfadó. Si estoy mal, ahora sé lo que me pasa y se lo puedo explicar a mis padres, esto me ayuda y hace que todo sea más simple…
Estas frases que podían haber sido escritas por algún psicólogo o experto en emociones, fueron escritas por un niño de 5ª de primaria después de haber recibido formación en Inteligencia Emocional.
La idea de que las emociones son esenciales para el aprendizaje, la toma de decisiones, el éxito académico, personal y social representa la base sobre la que se construye la educación emocional, ésta se basa en el entrenamiento de aspectos emocionales y sociales desde edades tempranas, con el objetivo de prevenir problemas y desarrollar mecanismos que promuevan el bienestar.
La educación emocional se sustenta en la idea de que la incapacidad para gestionar las emociones propias y ajenas pueden estar a la base del bajo rendimiento académico, los problemas de conducta y el desajuste psicológico.
Nuestro programa de educación emocional está basado en el modelo teórico de mayor evidencia científica, el modelo de Inteligencia Emocional de los autores John Mayer y Peter Salovey, profesores de la Universidad de New Hampshire y la Universidad de Yale, respectivamente. Este modelo se basa en la premisa de que las habilidades que componen la Inteligencia Emocional pueden ser entrenadas y mejoradas a través de programas de entrenamiento, de hecho estos programas ya han mostrado ser una de las vías más prometedoras para promover el bienestar psicológico y el desarrollo óptimo de nuestros chicos y chicas.
- El Reconocimiento Emocional: Fomentar las habilidades relacionadas con la detección de emociones en expresiones faciales y sensaciones corporales, diseños, etc.
- La Comprensión Emocional: Aprender a identificar las causas y consecuencias de sus emociones y la consciencia sobre las mismas.
- El Vocabulario Emocional: Aprender a describir de manera precisa cómo se sienten, utilizando un vocabulario más rico y sofisticado.
- La Expresión Emocional: Experimentar y asimilar diferentes maneras de exteriorizar sus sentimientos de forma adecuada y en diferentes contextos.
- La Regulación Emocional: Adquirir destrezas para manejar sus emociones para tomar mejores decisiones, fomentar las relaciones saludables y promover la resolución efectiva de situaciones difíciles.
Un artículo de Ruth Castillo Gualda, que impartirá nuestros cursos de Educación Emocional y Social para niños y Educación Emocional y Social para adolescentes.
Doctora en Psicología, experta en Inteligencia Emocional para el desarrollo psicológico y el bienestar, formada en la Universidad de Yale, colaboradora del programa del Yale Center for Emotional Intelligence.