
8 ideas para gestionar los cambios en la menopausia y disfrutar de nuestra sexualidad
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Hace unos días me hablaron del estreno de “Menopause, el musical de Broadway”. Me sorprendió, y gratamente, que de un modo tan natural se usase la palabra menopausia como título, nada menos, que de un musical de la Gran Vía de Madrid. Lo busqué en la cartelera y leí el eslogan con el que se anunciaba: «¡La celebración hilarante de la Mujer y el cambio!». Me gustó la palabra “cambio” y en la sinopsis de la obra, me interesó uno de sus principales mensajes, que la menopausia “deje de ser un problema que se sufre en silencio, para convertirse en una etapa de la vida de toda mujer, perfectamente normal”. Un buen mensaje y un buen formato, que resta dramatismo y suma a este tema humor y diversión. En definitiva, una buena idea que me hizo pensar sobre uno de los temas que en muchas ocasiones centra esta etapa de cambio en la mujer: la sexualidad, y que me motivó a escribir este artículo sobre menopausia y sexualidad.
La menopausia: una etapa vital de cambio
Cómo decía la sinopsis de la obra, la menopausia, o climaterio femenino, es una etapa más de la vida de toda mujer, perfectamente normal.
Biológicamente está determinada por la disminución de estrógenos, progesterona y otras hormonas, lo que conlleva la desaparición de la ovulación, de la menstruación y de la capacidad reproductiva.
Pero tal vez lo más característico de este período sea que: es un tiempo de cambio; y como todos los momentos o etapas de nuestra vida donde se producen cambios, lo fundamental va a ser el modo en el que manejamos los factores que intervienen en esos cambios: físicos, sociales, y en gran medida, psicológicos y emocionales.
La menopausia es una etapa de cambio, y en todos los cambios nuestra actitud es la clave Clic para tuitearMenopausia síntomas emocionales
En la menopausia se produce un cambio biológico, un cambio hormonal, cuyas consecuencias más evidentes se dan en la esfera física, síntomas de distinta intensidad según las mujeres: alteraciones –casi siempre leves– en los órganos sexuales, sofocos, sudoración o palpitaciones, dolores de cabeza, insomnio, aumento ocasional de peso, entre otros.
Pero lo cierto, es que son los aspectos emocionales y psicológicos de la menopausia, los que ocasionan más desconcierto e incluso sufrimiento en nosotras, las mujeres.
- Cambios de humor
- Síntomas depresivos –tristeza, fatiga, cansancio…–
- Dificultades de concentración
- Ansiedad y miedos
- Irritabilidad
- Baja autoestima
- Bajo deseo sexual
La menopausia es un momento de cambio, y este cambio tiene lugar en un período de edad donde las mujeres nos vemos afectadas por factores sociales que ejercen una gran presión sobre nosotras: preponderancia de la juventud y el físico, fin de la maternidad, el síndrome del “nido vacío”, la valía personal…
En este contexto, los síntomas adquieren una dimensión distinta en función de nuestras propias creencias y el modo en el que procesemos los cambios y las manifestaciones físicas y psicológicas de la menopausia.
En ocasiones, las mujeres podemos llegar a experimentar sentimientos de pérdida, de tristeza, de vacío y otras emociones muy similares a las que se sienten en el proceso de un duelo.
Diríamos que la llegada de modo inesperado de este momento vital, se vive pasando las mismas fases que otros duelos emocionales.
Las emociones que se experimentan ante la pérdida definitiva de la menstruación y de la capacidad reproductiva, pueden ser, en algunas mujeres, igual o de mayor intensidad y complejidad al duelo por la pérdida de un ser querido.
El duelo es un proceso de adaptación emocional que sigue a cualquier pérdida que no está bajo nuestro control y que conlleva impotencia, frustración, desesperanza, incertidumbre y por supuesto tristeza.
Es importante contar con una buena psicoeducación que propicie una actitud adecuada frente a la menopausia y favorezca el correcto afrontamiento de esta etapa vital.
Una actitud adecuada frente a la menopausia favorece vivir esta etapa de un modo estimulante Clic para tuitear
Gestionar adecuadamente algunos de los síntomas de la menopausia
- Sofocos e insomnio. Es importante saber que no todas las mujeres van a sufrir estos síntomas, muchas no los manifiestan. Los sofocos suelen producirse más por la noche, debido a la bajada de estrógenos, por lo que pueden afectar al sueño. El doctor Santiago Palacios, director del Instituto de Menopausia en la Fundación Jiménez Díaz, afirma que en muchas ocasiones se acaban tomando “antidepresivos, ansiolíticos o productos para conciliar el sueño”, cuando lo lógico es consultar a un especialista, que aconsejará tomar un medicamento dirigido a elevar el nivel de estrógenos.
- Aumento de peso. Si bien es cierto que se pueda ganar algo de peso, este hecho hay que atribuirlo a una pérdida de masa muscular y al aumento de los adipocitos. Para minimizar el efecto, es aconsejable reforzar en esta etapa de cambio el equilibrio de nuestra dieta y los hábitos saludables –como la actividad física–, recomendaciones igual de válidas en cualquier otra etapa de nuestra vida.
- Cambios de humor. No tienen por qué darse de manera más acusada. El cambio hormonal puede tener menos peso que nuestra propia adaptación a esta nueva etapa vital.Para favorecer el ajuste, es importante restar dramatismo la pérdida de la capacidad de concebir, por ejemplo, y darle valor a una etapa donde deben destacar la experiencia, la sabiduría, la madurez o la estabilidad lograda.
Menopausia y sexualidad
La disminución de estrógenos puede provocar en algunas mujeres alteraciones como la sequedad vaginal y en consecuencia dolor en las relaciones sexuales, originando temor o rechazo al coito como respuesta a este dolor, y progresar hacia fobia al coito o dificultades como el vaginismo, problemas para alcanzar el orgasmo o para “sentirlo como antes”.
De igual modo algunas de los síntomas que he mencionado anteriormente –sofocos, dolor de cabeza, irritabilidad, cambios de humor, tristeza, etc.–, pueden afectar al deseo y a la motivación sexual.
Lo importante es ser conscientes de que la vida sexual en la menopausia no tiene porqué verse afectada.
Nuestra sexualidad depende de un conjunto de factores, no sólo físicos, sino educacionales, psicológicos y emocionales. Nuestro margen de maniobra es muy amplio.
Los síntomas de la menopausia afectan en una medida muy pequeña en comparación a nuestra capacidad para actuar sobre todos esos factores y lograr una satisfactoria vida sexual, también en este período.
Lo primero es consultar con un especialista para determinar el alcance de los síntomas físicos que nos afectan.
Será el especialista el que prescriba el tratamiento más adecuado: por ejemplo la aplicación de técnicas médicas que aumenten el flujo sanguíneo y estimulen las células para producir más colágeno y elástica. Estas soluciones, casi siempre fáciles y a nuestro alcance, nos permitirán concentrarnos en lo importante: mejorar nuestro placer sexual, que supone beneficios para decisivos para nuestra salud física y emocional.
8 consejos sobre menopausia y sexualidad
- Aceptar y adaptarse a esta nueva etapa vital. Es verdad que existen cambios en la sexualidad, pero eso no significa que el placer sexual disminuya o se limite. La menopausia es biológicamente el final de nuestra etapa reproductiva, pero no significa que, si lo deseamos, no continue nuestra vida sexual. Otra creencia errónea es asociar menopausia con vejez y en consecuencia sentirse mayor para tener relaciones sexuales. Acude a un psicólogo o psicóloga si sientes que necesitas ayuda para comprender y entrenar este cambio en tus creencias.
- ¡Vida saludable!. Realiza actividades físicas, pasea, cuida tu alimentación, tus tiempos de descanso, tus momentos gratificantes y dedicados a ti. Todo ello contribuye a aumentar tu vitalidad y tu deseo sexual.
- Cuida tu salud sexual. Acude al especialista para que valore las necesidades de un adecuado tratamiento con lubricantes, cremas con estrógenos de uso tópico… Haz las revisiones médicas oportunas, consulta y trata adecuadamente cada cambio que se produzca, como la sequedad, las molestias, el dolor, así como cualquier dificultad que tengas en la esfera sexual. Los médicos y los psicólogos y psicólogas especialistas en sexualidad estamos para ayudarte.
- Dedica tiempo a tu placer sexual. Esta es una buena etapa para reflexionar sobre las cosas que te producen placer. Busca un tiempo para fantasear y explorar la zonas erógenas de tu cuerpo.
- Cuida y fortalece los músculos de la zona genital. Realiza ejercicios físicos para fortalecer la zona pubococcígea y mantenerla cuidada, esto favorece muy positivamente el placer que vamos a sentir.
- Planifica los encuentros sexuales. Planea y decide el momento. La espontaneidad está muy bien, pero a veces con la rutina y las prisas nos cuesta encontrar el momento para disfrutar de la sexualidad. Que si lo deseas, sea parte de tu vida, que tenga el hueco que se merece y que sea en el ambiente que te agrade donde dar placer a los sentidos.
- Cuida la comunicación con la pareja. Es esencial tener una buena comunicación, pero es importante hacer participar a tu compañero o compañera de los cambios que estas sintiendo en esta nueva etapa de tu vida. Comenta los cambios que observas asociados a la menopausia. Ayudará a que la pareja los comprenda y pueda adaptarse a ellos. En cuanto a la comunicación sexual, habla de las cosas que te gustan, de las que se pueden mejorar, de las que ahora deseas que cambien.
- Se creativa con los hábitos sexuales. El sexo no es solo coito. Es interesante hacer y probar cosas nuevas. Si algo no podemos hacer por enfermedad o porque deja de gustarnos, hay que probar hacerlo de diferente manera. Si tenemos molestias en el coito, disfrutar con otras prácticas sexuales igual o más placenteras, como las caricias genitales, masajes, etc. Cuando las cosas cambian hay que adaptarse al cambio y cambiar con ellas.
Estos consejos sobre menopausia y sexualidad, estoy convencida de que no serán sencillos de seguir para todas. Comprendo la preocupación o el miedo que se siente ante los cambios que supone la menopausia. Recuerda que las personas tenemos una capacidad inimaginable de adaptarnos a lo que la vida nos vaya proponiendo.
Tu actitud activa y comprensiva va a ser la mejor aliada para adaptarte a la menopausia Clic para tuitearTe animo a que cada vez que sientas los síntomas los asocies a algo normal que tienes que sentir en este momento de tu vida. Tu actitud activa y comprensiva va a ser la mejor clave para adaptarte a la menopausia y afrontar esta etapa como una más de la vida.
Reflexiones sobre menopausia y sexualidad. El sexo después de los 50
Para finalizar este artículo sobre menopausia y sexualidad, os dejo una reflexión que expresa Suzanne Braun Lavine en su artículo titulado «Ocho razones por las que el sexo es mejor después de los 50».
Esta reflexión está dirigida a aportar sugerencias e ideas. Lo fundamental es que respetemos nuestra forma de ver y sentir la sexualidad, siendo coherentes con la educación, convicciones o creencias religiosas que hemos aceptado, de tal modo que vivamos esta etapa con plenitud y satisfacción.
Suzanne subraya como “antes de los 50 la mayor parte de las mujeres invierte muchos años en mitos románticos […], pero cuando se entra en la segunda edad adulta, la experiencia y la independencia que traen los años hace que muchas mujeres empiecen a separar sexo de otros cuestiones, lo que les hace diseñar a su gusto sus encuentros sexuales, […] y disfrutar de su sexualidad, sin más”.
Autora

Psicóloga Sanitaria. Sexóloga. Experta en Terapia de Pareja y Sexualidad. Especialista en conflictos de pareja e intervención familiar.
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