(Tiempo de lectura 20 minutos) ¿Soy “normal” o podría tener un trastorno de personalidad? Esta pregunta, que sirve de título a este artículo, no es una pregunta del todo apropiada, aunque sí es una pregunta frecuente –en mi trabajo como psicóloga la escucho muchas veces en consulta–. ¿Y por qué afirmo que no es apropiada? La respuesta está en la palabra “normal”, que he entrecomillado muy a propósito, porque… ¿qué es una personalidad normal?
Tener unos rasgos de personalidad singulares no significa que se tenga un trastorno de personalidad. La clave está en cómo, desde esa personalidad, nos relacionamos con nuestro entorno, la forma en la que procesamos nuestras experiencias vitales y sus consecuencias.
Es natural reflexionar sobre nuestra personalidad, y lo es preguntarse si nuestros pensamientos, conductas y emociones están manifestando una dificultad que comprometa nuestra salud, por supuesto que es natural, pero conviene que esta reflexión se realice desde una buena información.
Ese es el objetivo de este artículo, aportar información, desde la ciencia de la Psicología, sobre términos como personalidad y trastorno de personalidad.