(Tiempo de lectura 9 minutos) No hay una época en la que pensemos más en los regalos que en las fiestas navideñas. Y en la espiral de compras que suponen estas fiestas podemos perder de vista cuál es el objetivo último que tiene el acto de regalar. ¿Tú qué piensas, para qué se hace un regalo? ¡Eso es! Para sentirse bien: para hacer sentir bien a otra persona o para sentirte bien tú.
Ahora sólo queda elegir el regalo para esa persona… ¿Qué le vendrá bien, que le hará ilusión, que necesita, qué le generará bienestar…? Tengo una sugerencia que hacerte, y creo que podría ser un regalo que no va a defraudar.