(Tiempo de lectura 18 minutos) Estamos ante una situación nueva para muchos de nosotros y nosotras, y como sucede con todo lo desconocido, nos genera incertidumbre y, sobre todo, miedo. Más aún, cuando sentimos amenazada nuestra salud y también la de nuestros seres queridos. ¡No hay duda! Nuestro bienestar emocional se está viendo afectado. Pero tenemos que recordar que hemos superado otras dificultades y que también superaremos esta. Lo importante es ser conscientes de que el afrontamiento psicológico de esta situación, generada por el Coronavirus, requiere, por nuestra parte, de una respuesta activa, adaptativa. La pregunta sería ¿estamos preparados para afrontarlo? ¡Sí, lo estamos!
Tenemos todo lo que necesitamos, nuestra capacidad de pensamiento y nuestros recursos emocionales, competencias que ya hemos utilizado en otros momentos, también difíciles. Es cierto que estas circunstancias son muy novedosas, y que tienen características que afectan de un modo muy radical a nuestra vida cotidiana, en la que nos sentimos seguros, pero nuestras fortalezas son notables y además, no estamos solos, podemos recibir y recibiremos ayuda. En estas situaciones se ponen de manifiesto la empatía y la solidaridad, y también la enorme implicación de profesionales de diferentes áreas de nuestra sociedad.
No obstante, de igual modo que hay colectivos sociales, como las personas de avanzada edad, que son más frágiles (en este caso por cuestiones biológicas) frente al Coronavirus, hay personas que tienen una mayor vulnerabilidad emocional, personas a las que esta situación les afecta de un modo más acusado y que también necesitan una mayor orientación, apoyo y ayuda.
A estas personas, más vulnerables emocionalmente, va dirigida, en primer lugar, esta Guía de Afrontamiento Psicológico ante el Coronavirus. Una guía que busca identificar, reflexionar y poner la atención sobre diferentes aspectos psicológicos en esta crucial situación.